Buñuelos de Cuaresma
El año pasado te compartí la receta de las torrijas con leche condensada (postre típico de la Semana Santa con unas u otras variaciones), pues hoy te traigo una receta de Cuaresma / Semana Santa que es toda una delicia: buñuelos.
Como sabrás (y si no te lo digo) los buñuelos son un plato típico que consiste en unas porciones de masa más o menos redondeadas que freímos, pueden ser dulces o salados, los de Cuaresma, son dulces, ideales para una merienda.
Ingredientes para hacer buñuelos de Cuaresma:
- 80g de harina de trigo
- 30g de mantequilla
- 150ml de leche
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharada de vino Pedro Ximenez o algún Oporto
- Ralladura de una naranja
- 1 cucharadita de anís en grano
- 1 huevo
- Una piza de sal
- Aceite para freir
- Azúcar para rebozarlos
Cómo hacer buñuelos de cuaresma
Esta receta la haremos en dos fases, primero haremos la mezcla de los buñuelos, habrá que dejar que se enfríe y posteriormente los freiremos, así que ten en cuenta que no puedes ponerte a prepararlos media hora antes de la merienda 😉
Preparamos la masa de los buñuelos:
Empezaremos por prepararnos en un bol la harina.
En un cazo ponemos la leche, la mantequilla, el azúcar, el anís, el vino, la ralladura de naranja y una piza de sal.
Ponemos el cazo en el fuego a tope y cuando rompa a hervir lo retiramos del fuego.
Vertemos de golpe la harina en el cazo y removemos con una espátula hasta conseguir una masa homogénea.
Ponemos de nuevo el cazo en el fuego, a temperatura media y continuamos removiendo hasta que la masa se despegue de las paredes del cazo.
En ese momento retiramos la masa del fuego y la dejamos enfriar.
Cuando la masa esté fría del todo, continuaremos.
Ahora nos toca formar los buñuelos propiamente dichos.
Comenzamos por batir un huevo y mezclarlo bien con la masa, hasta que quede todo integrado.
En un wok o una sarten honda, ponemos abundante aceite para freír.
Calentamos el aceite a una temperatura media-alta, pero no muy alta ya que la masa tendrá que cocinarse bien por dentro…
Con la ayuda de dos cucharillas, iremos tomando porciones de la masa y echándolas en el aceite.
Cuando veamos que la masa se empieza a dorar se le da la vuelta y dejamos que se fría igualmente por el otro lado.
Una vez frita la masa, la retiramos a un plato con papel absorvente.
Cuando los buñuelos hayan perdido temperatura, los rebozamos en azúcar y ¡a disfrutar!